Biorremediación con vegetales: fitorremediación de aguas residuales. Contaminación ambiental, medio ambiente
La biorremediación se logra usando seres vivos capaces de metabolizar: transformar, degradar, disminuir o eliminar de un ecosistema a sus contaminantes. Sería básicamente, reproducir lo que ocurre en los suelos y cuerpos de agua en la naturaleza cuando se depuran de manera natural. Sin necesidad de implementar aparatología costosa ni de efectuar grandes gastos de energía ni grandes impactos al ambiente.
Cuando se trata de recuperar un ecosistema acuático hablamos de fitorremediación
En este caso se emplean aquellas especies vegetales con la mayor capacidad de tolerar, asimilar o acumular grandes concentraciones de residuos radioactivos, orgánicos o metales pesados. Lo fantástico es que comparándolo con un sistema estándar de depuración de agua, este sistema de biorremediación considerado blando implica bajo consumo energético y bajo impacto ambiental.
Podemos distinguir distintos sistemas de fitorremediación entre los sistemas blandos de biodepuración. Tenemos los humedales artificiales, los filtros verdes y los lagunajes. En cada uno de ellos diferentes combinaciones de microorganismos y vegetales, son las encargadas de la “limpieza” de los cuerpos de agua.
Humedales
Un humedal natural es un tipo muy específico de ecosistema caracterizado por su gran biodiversidad. Involucra a diversos tipos de plantas acuáticas, terrestres y palustres, así como a varios niveles de insectos, algunos mamíferos, anfibios, reptiles y principalmente variedad de aves. Su gran humedad los provee de abundante vegetación en todos los planos. Siendo este ambiente una combinación acuática -terrestre con mucha área transitiva en que la misma vegetación hace creer que la zona pantanosa es tierra firme. Este tipo de ecosistema además se ser considerados mundialmente refugio de biodiversidad y patrimonio para la conservación, ya son reconocidos como filtros biogeoquímicos que intervienen en la estabilidad del clima, la regulación del ciclo hidrológico, y en la recarga de acuíferos.
Por todo esto los humedales artificiales en el lugar de los sistemas convencionales de depuración, presentan un gran potencial para el tratamiento de aguas servidas. Reproduciendo la perfecta combinación entre macrófitos, algas, vegetales palustres y otros microorganismos de los humedales naturales, se dan tratamiento a aguas residuales urbanas y para aguas servidas (como por ejemplo en casos de drenajes ácidos de minas). Siendo este tipo de sistema de fitorremediación el más indicado para reducir elevadas concentraciones de metales pesados de manera ecológica. Las que resultan de las extracciones y del procesamiento del mineral, entre otras.
Los filtros verdes como sistemas de Fitorremediación
Los filtros verdes o bandas de vegetación son una especie de sistema de biodepuración que podríamos llamar transitivo. Se debe a que con ellos se intenta recuperar y conservar al agua y al suelo al mismo tiempo. Estos filtros son diseñados para eliminar sedimentos, residuos orgánicos, residuos agroquímicos y aguas residuales. Básicamente actúan entre las posibles fuentes contaminantes y los cursos de agua a salvaguardar. Disminuyen el avance de la contaminación al contactarse los agentes contaminantes con las bandas vegetales, sumado a que ayuda a la decantación de solidos suspendidos, al mismo tiempo que favorece la infiltración del agua en el suelo. En definitiva son ideales para proteger de manera sustentable y con un mínimo consumo energético, a los causes de agua de los contaminantes residuales de las actividades agrícolas, y a las aguas de los contaminantes residuales domésticos.
El lagunaje
En el lagunaje la fitorremediación se cimenta en la en la combinación conjunta de potencialidades de microorganismos y de vegetales. Básicamente porque los primeros metabolizan la mayor parte de las sustancias orgánicas disueltas en el ecosistema acuático. Mientras que las plantas las absorben (en especial a los sulfatos, nitratos y al fósforo). Estas plantas distribuyen una parte del oxígeno producido a las raíces. Mientras que otra parte pasa al agua induciendo la actividad metabólica de los microorganismos, manteniendo así la depuración, (oxígeno que en una depuradora convencional se incorporaría por el bombeo de aire al agua mediante bombas eléctricas consumiendo energía eléctrica); en cambio de esta manera se utiliza una energía alternativa inocua.
En el transcurso de este proceso de absorción y transformación de contaminantes disminuyen notoriamente los niveles drásticos de riesgo en aguas y suelo. Al final del dispositivo de fitorremediación por lagunaje el agua que se obtiene está completamente limpia.
Los fitosistemas entonces son sistemas blandos de depuración de residuos antropogenicos en los cuerpos de agua o en ecosistemas de transición suelo-agua. Entre estos encontramos los lagunajes (en los que actúan algas y bacterias suspendidas en el agua), los filtros verdes (en los que intervienen diferentes especies herbáceas o leñosas), y los humedales artificiales (en los que la fitodiversidad es máxima). Todos ellos representan una manera alternativa, sustentable y económica de recuperar la calidad del agua y al mismo tiempo el suelo; de eso se ocupa la fitorremediación.